Por ello el soporte técnico de
comienza
en la fase de preventa de un producto, aconsejando en la selección del más adecuado a las
necesidades del cliente, la personalización del producto si esta fuese necesaria y continúa
en la fase de postventa colaborando con el cliente en la mejor utilización del mismo.
Durante la postventa el soporte técnico va más
allá de la reparación o sustitución de los elementos defectuosos, ayudando al cliente en la
optimización de su aplicación y el funcionamiento del mismo.
Además
ofrece para todos los productos
industriales el servicio de ampliación de garantía, más allá del periodo incluido por el fabricante. |